Con el
objetivo de ayudar y dotar de más herramientas de cotización a las y los
consumidores que necesitan obtener un préstamo, el Servicio Nacional del
Consumidor (Sernac) dispuso de una versión actualizada del “Comparador de
Crédito de Consumo”.
Esta
herramienta, que fue recientemente sondeada con consumidores, presenta una
nueva interfaz, que permite con sólo tres filtros, obtener una simulación de un
crédito de consumo.
La mayor ventaja
de este instrumento es que las y los consumidores pueden cotizar y comparar las
distintas alternativas de créditos de consumo entre las entidades financieras
del país.
De esta forma,
las personas, antes de solicitar el crédito, pueden saber cuál será el valor de
la cuota, la tasa de interés, la Carga Anual Equivalente (CAE), el Costo Total
del Crédito (CTC), entre otros indicadores.
Este simulador
gratuito, que ya está disponible en el sitio web www.sernac.cl, cuenta con
información de una gran cantidad de entidades de préstamos formales. Esta
herramienta se actualiza automáticamente, a principio de cada mes, con
información proporcionada por las propias entidades financieras.
A modo de
ejemplo, desde el organismo aseguraron que para un crédito de $1.000.000 a 12
meses, sin seguro de desgravamen, un consumidor podría pagar un Costo total del
Crédito (CTC), entre un mínimo de $1.094.256 hasta $1.226.978, esto es, una
diferencia de $132.722 entre la opción más económica y la más cara, por lo que
es fundamental saber cotizar antes de elegir endeudarse.
Para René
Fernández Montt, economista y académico de la Facultad Tecnológica de la
Universidad de Santiago, uno de los grandes problemas de las y los clientes
nacionales radica en la baja comprensión lectora que desarrollan, y que los
lleva a no entender las condiciones del crédito que solicitan.
Otro error
frecuente, es no comparar opciones en el mercado antes de endeudarse. “Muchas
veces se opta por la comodidad, se decide por adquirir endeudamiento en el
Banco de toda la vida, lo que no es lo recomendable.
Siempre se debe
evaluar distintas alternativas y es más, incluso existe poder negociador por
parte del cliente si cuenta con diversas alternativas”, sostuvo Fernández
en Diario Usach.
Desde el
punto de vista del experto, la falta de educación financiera es clave en las
malas decisiones de endeudamiento que toman chilenos y chilenas.
“’No se debe
hablar de dinero en la mesa’ se decía antaño. Si no se habla de dinero, no se
aprende sobre él y obvio, se toman pésimas decisiones financieras como los
recordados casos Arcano o Garay.
No obstante, instituciones públicas como el Banco Central, la Comisión para el Mercado Financiero y el SERNAC propician la educación financiera.
Además, la Ley
General de Educación (LGE) desde 2018 ha incorporado la educación financiera en
el currículum de enseñanza media, en asignaturas como Ciencias Sociales y
Matemáticas. Por lo tanto, el nivel de alfabetización financiera está compelido
a seguir mejorando”, señaló el economista.
Según René
Fernández, la falta de educación financiera puede implicar:
Desconocimiento
de los productos financieros: La falta de educación financiera puede llevar a los consumidores a
desconocer los productos financieros y sus características.
No
entender los riesgos: Los consumidores pueden no entender los riesgos
asociados a los créditos, como la posibilidad de incumplimiento y las
consecuencias legales.
No planificar el presupuesto: La falta de educación financiera puede llevar a los consumidores a no planificar su presupuesto y a endeudarse más de lo que pueden manejar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario