No solo está evolucionando el cuándo, cómo y dónde trabajar, sino también, quiénes forman parte de la fuerza laboral.
Una tendencia en aumento es la contratación de personas mayores de 50
años, lo que se ha demostrado como un elemento clave para el éxito de las
organizaciones.
Este cambio no solo desafía los estereotipos
sobre la edad en el trabajo, sino que también destaca la importancia de la
diversidad generacional como motor de innovación y productividad.
El Instituto Nacional de
Estadísticas (INE) actualizó sus proyecciones, mostrando un acelerado
envejecimiento en Chile. Se espera que para 2024, la población mayor supere a
la de menores de 15 años, y que para 2026, más del 20% de la población tenga 60
años o más.
A largo plazo, para 2045, las
personas mayores podrían duplicar a las menores de 15 años, y para 2050, casi
un tercio de la población será mayor de 60 años, con un aumento significativo
de la "cuarta edad". Estos cambios demográficos plantean desafíos
significativos para el país en términos de políticas públicas, salud, economía
y, por supuesto, en el ámbito laboral.
El valor de los talentos 50+
Los profesionales mayores de
50 años poseen una riqueza de experiencia y conocimiento que no puede ser
subestimada. Su capacidad para resolver problemas, tomar decisiones informadas
y guiar a equipos más jóvenes son activos invaluables para cualquier organización.
Además, su lealtad y compromiso suelen traducirse en una mayor estabilidad y
menor rotación dentro de la empresa.
"Para que las
organizaciones sigan creciendo de manera sostenible, es fundamental que
implementen políticas que reconozcan y valoren el aporte de los trabajadores
mayores de 50 años. Esto incluye ofrecer oportunidades de formación continua en
nuevas tecnologías y metodologías, así como incentivos para que estos talentos
permanezcan en la organización", expresa Alejandro Servide Alejandro
Servide, director de Professionals, RPO & Technologies de Randstad.
Un estudio realizado por el
Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la Universidad
Católica reveló que, aunque la tasa de participación laboral de personas
mayores de 50 años ha aumentado en las últimas décadas (45,8%), aún no ha recuperado
los niveles previos a la pandemia (50,8%).
Las barreras persistentes que
limitan su pleno acceso al empleo incluyen la discriminación por edad, la falta
de oportunidades para la formación y actualización de habilidades, y la escasa
flexibilidad en las condiciones laborales.
Para atraer y retener a una
fuerza laboral mayor de 50 años, el director entrega algunos tips, como
“considerar opciones de trabajo flexible, motivándolos a permanecer activos por
más tiempo en el mercado; involucrarlos en planes orientados a aumentar el
compromiso de otros, como mentorías y conocer su nivel de satisfacción con la
organización, puesto que un trabajador a gusto es más productivo; considerar
también a los trabajadores mayores de 55 para tareas de trabajo temporal,
porque esta modalidad les permitirá tener periodos de descanso intercalados y
desarrollar una estrategia home-grow, es decir, tener pasantías, programas de
postgrado y de formación robustos para desarrollar el talento necesario,
manteniendo el crecimiento de la empresa”, finaliza Servide.
La diversidad generacional es
una demanda creciente de la sociedad y un valor que gana cada vez más
relevancia en el mundo empresarial. Muchas organizaciones ya la han integrado
en sus valores y principios para fortalecer su marca empleadora; algunas lo hacen
por convicción, mientras que otras responden a la creciente presión social por
una mayor inclusión y equidad.
Sin embargo, más allá de la
motivación, es fundamental que las organizaciones se sumen activamente a esta
tendencia. En un contexto donde la diversidad generacional no solo enriquece la
cultura corporativa, sino que también impulsa la innovación y la resiliencia,
apostar por ella es clave para enfrentar los desafíos de un mercado laboral en
constante evolución.
"En los entornos
laborales actuales, convivimos al menos cuatro generaciones, lo que refleja los
profundos cambios sociales que Chile ha experimentado. Es crucial que las
organizaciones promuevan espacios donde los jóvenes que inician su carrera y el
personal con más de 25 años de antigüedad interactúen y se enriquezcan
mutuamente.
Los trabajadores mayores
aportan experiencia, estabilidad y valores, mientras que los más jóvenes
introducen perspectivas frescas. Esta interacción genera una sinergia que no
solo fortalece al equipo, sino que también dota a la cultura laboral de una identidad
única y dinámica, potenciando la innovación”, concluye Alejandro Servide.
Randstad es la compañía de talento líder a nivel global, impulsada por la visión de convertirse en la empresa de talento más equitativa y especializada del mundo.
Como socio para el talento y,
a través de nuestras soluciones de recursos humanos
brindamos la fuerza laboral ágil,
diversa y de alta productividad que nuestros clientes necesitan para tener
éxito en un mundo con creciente escasez de talento.
En Randstad ayudamos a las
personas a avanzar en su carrera profesional, desarrollar habilidades
relevantes y encontrar propósito y pertenencia en su lugar de trabajo.
Con sede en los Países Bajos, Randstad opera en 39 mercados a nivel global, cuenta con más de 43.000 empleados y cotiza en Euronext Amsterdam. En 2023, la compañía apoyó a 2 millones de talentos para encontrar un trabajo y generó ingresos por más de 25 400 millones de euros.
Randstad en Chile se
especializa en Reclutamiento y Selección, Servicios Transitorios (EST),
Outsourcing, In House, Executive Search y Recruitment Process Outsourcing y a
través de sus 8 oficinas, presta servicios de gestión de talentos a nivel
nacional.
Para más información, visite: www.randstad.cl
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